Con ellas aprendí a:
- Relajarme
- Mantener la calma
- Ser más consciente del presente
Lo hago todas las mañanas al meditar y todas las noches justo antes de dormir. Esta última la hago así:
- Pijama cómoda
- Posición que adoptó para dormir
- Cierro los ojos
- Respiro como normalmente lo hago
- Me concentro en mi respiración
- En cada inhalación imagino que recibo calma, tranquilidad, paz, amor, luz blanca.
- Al exhalar imagino que salen preocupaciones, lastres, pensamientos negativos, luz gris.
- Y así me quedo dormida más rapidito :)
Es verdad que después de unos segundos me disperso y comienzo a pensar en la inmortalidad del cangrejo, pero lo importante es que cuando me doy cuenta, vuelvo a centrarme en mi respiración.
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